sábado, 16 de enero de 2010

El baloncesto, el mate y la macedonia

Qué anuncio más ingenioso acabo de ver. Si no me equivoco es de un yogurt de Pascual, porque se llama Yosport. En la publicidad, el jugador de baloncesto Rudy Fernández protagoniza un mate en una canasta, pero en lugar de hacerlo con un balón, lo hace con un envase de plástico que contiene una macedonia de fruta. Claro, al hacerlo, todos los trozos de fruta quedan desparramados por el suelo del pabellón. Menos mal que han optado por trocitos de fruta en lugar de elegir una sandía de tres kilos; pobre Rudy, qué esfuerzo habría tenido que hacer.

Nada más ver el anuncio, me han entrado ganas de comerme uno de esos yogures. Seguro que están muy ricos. Es el claro efecto de la publicidad, especialmente gracias a esos trocitos de fruta caídos por el suelo.

En este caso, los especialistas del marketing han tenido una visión brillante: sustituir una pelota por una macedonia. La próxima vez pueden reemplazar el balón por una jarra de leche, aunque en este caso, el efecto de caída de la leche sería similar al que provocan los ganaderos cuando se manifiestan y arrojan al asfalto de las calles varios cientos de litros de leche.

Siguiendo esta técnica publicitaria en la que una compañía de alimentación "tire" fruta por el suelo, la próxima vez, una empresa de coches puede anunciar un nuevo vehículo estrellándolo contra un muro. Venga, hay que ir pensando.

viernes, 15 de enero de 2010

Youtube y el tarot del amor

Siempre me ha gustado Youtube. Desde que surgió de las cavernas de internet, me ha parecido una forma de entretenimiento espectacular. Y digo espectacular porque se pueden pasar muchas horas viendo los espectáculos musicales de artistas legendarios.

Pocas veces me había fijado en la publicidad que Youtube expone en sus distintas webs o adosadas a diferentes vídeos. Pero, ahora que he reparado, que anuncios más espectaculares. Y son varios.

"Tarot del amor. ¿Celos? ¿Dudas?". Sin duda, el remedio para los males de amores de muchos y una vía para encontrar la estabilidad sentimiental.

"¿Cómo será tu 2010?". Voy a probarlo porque me gustaría saber cual es el rumbo que este nuevo año me va a marcar. Amor, trabajo, salud, mi equipo de fútbol... son muchas las incógnitas que me gustaría resolver.

"Descubre gratis cuanto te queda". No lo entendía bien hasta que reparé en que las letras del anuncio aparecían sobre una tumba. Qué sabiduría.

martes, 5 de enero de 2010

Flash Gordon y Ornella Muti

No sé de qué manera, pero el otro día me vinieron a la cabeza las viejas historias de héroes como el Príncipe Valiente o Flash Gordon. Que buenos recuerdos me traen los tebeos y las películas. El caso es que me puse a buscar vídeos y otras informaciones de estos superhéroes en internet. Sus historias, sus creadores, su música con la casi legendaria canción de Flash Gordon interpretada por Queen.

Pero al llegar a la Wikipedia y leer las referencias a la película de Flash Gordon de 1980 me llevé un chasco: "la película fue un fracaso comercial". Vaya, y todo a pesar del vuelo de Flash Gordon en una moto voladora junto a los hombres halcón hacia el palacio del emperador Ming, de la lucha entre Flash y el Príncipe Barin en la plataforma circular que daba vueltas y de la que salían dagas del suelo, y, como no, de lo bien que estaba Ornella Muti en pleno esplendor como la princesa Aura. Bueno, mejor dicho, de lo buena que estaba. Pese a todo, siempre nos quedará Queen. "Flash, aaaaaasssshh".

¡A trabajar!

Tras unos días de descanso, ayer volví a trabajar. Era mi debut laboral en el nuevo 2010. Me dirigía caminando hacia mi oficina con ese pesar que se tiene cuando hay que volver a trabajar; algunos psicólogos lo definen como el síndrome post-vacacional aunque yo creo que es más bien una mezcla de cansancio y sueño. "A trabajar otra vez", pensaba yo.

Sin embargo, doblé la esquina de la calle y me encontré con una oficina del Instituto Nacional de Empleo (INEM) que acaban de abrir muy cerca de mi trabajo. Y no es que estuviera sólo la oficina, es que de sus puertas salía una larga (y ancha) fila de personas que estaban esperando bajo la lluvia y el frío. No sé como explicarlo pero, me fui más contento a trabajar.