lunes, 30 de abril de 2012

Conspiración de las eléctricas para que haga frío y haya calefacción, y en pocos días calor y aire acondicionado


Acaba el mes de abril. Y como dice el refrán, en abril aguas mil. La cuestión es que este dicho se ha convertido en realidad en estos últimos días del mes. Mañana empieza mayo. Veremos cómo vienen las temperaturas. 

Lo cierto es que en Madrid llueve y hace frío. Tanto es así que en casa tenemos calefacción. Y no soy el único. Con muchos con los que he hablado esta tarde están en las mismas circunstancias. Esta situación me ha llevado a una profunda reflexión. Hay una conspiración de las empresas eléctricas y gasistas para manipular la meteorología y que mantengamos la calefacción encendida. Así gastamos electricidad, gas o gasóleo.

Si es electricidad ayudaremos a las eléctricas a reducir el tan traído y llevado déficit tarifario, que asciende a muchos miles de millones de euros. ¿24.000 millones?

Ahora sólo falta que pasemos del invierno al verano sin pasar por la primavera. Con esta evolución no sería descartable que en pocos días empezase a hacer mucho calor con lo que se pasaría de la calefacción al aire acondicionado. Si es así, mejor para la tarifa eléctrica y nueva vía para reducir el déficit tarifario. Lo dicho, una conspiración de las eléctricas. 

domingo, 29 de abril de 2012

Vuelve el Southampton, el equipo de "Un hombre en casa" y vestidor del Athletic y del Atleti


Una de las noticias deportivas del fin de semana en Reino Unido ha sido el retorno a primera división (conocida como Premier League) del histórico Southampton. El equipo rojiblanco del sur de Inglaterra ha ascendido a la máxima categoría tras muchos años de infierno en segunda división. 

La verdad es que la trayectoria deportiva del Southampton me da igual, pero al leer la noticia de su ascenso he recordado que el Southampton era el equipo de Robin, el protagonista de la conocida serie de televisión inglesa “Un hombre en casa”, junto a las bellas Chrissy y Jo, con las que vivía en un piso en Londres, y sus vecinos, los legendarios Róper, Mildred y George. ¿Quién no recuerda “Un hombre en casa”? 




Con respecto al fútbol, hay un capítulo en el que Robin (acompañado de Jo o Chrissy) se desplaza a ver un partido del Southampton, ataviado con la camiseta rojiblanca. En el desplazamiento se encuentra con aficionados del otro equipo, algunos bastante hooligans y… líos y embrollos. 

Pero el Southampton también ha tenido una importante relevancia en la historia del fútbol español. Cuenta la historia, casi leyenda, que un directivo del Athletic de Bilbao viajó a Inglaterra a principios del siglo XX a Inglaterra a comprar camisetas para el equipo. Su intención era adquirir la elástica azul y blanco del Blackburn Rovers. Sin embargo, no pudo adquirirlas porque estaban agotadas y, cuando iba a volver desde Southampton a Bilbao, se hizo con camisetas rojiblancas del equipo de la ciudad inglesa.

No voy a decir nada sobre qué colores visten ahora, y desde hace cerca de cien años, el Athletic de Bilbao y el Atlético de Madrid: el rojiblanco. Unos colores que van a chocar dentro de unos días en la final de la UEFA Europa League.


Ps: Tengo que destacar que la serie “Un hombre en casa” tuvo un gran éxito a finales de los setenta y principios de los ochenta en España. Uno de los profesores más amables que tuve en el colegio, además profesor de inglés, era conocido como el “Róper”. 

sábado, 28 de abril de 2012

La burbuja de las cobayas explota


Todo está en rebajas. Hasta las pobres cobayas. Caminaba hace unos días por Jardiland y vi esta oferta: lote de cobaya peruviana, antes 97 euros, ahora 64 euros. Incluye la jaula, comida y otra serie de enseres para la buena vida de estos animalitos, primos mayores de los hamsters. Ya están como los pisos en España, promociones y rebajas.




Con la crisis, ya no se quiere ni a las mascotas, tan queridas por niños y adultos. He leído en un blog especializado de mascotas que la cobaya peruviana, que es una raza bastante peluda, es un animal muy sociable que puede vivir en pareja, y convivir incluso con los conejos.

Aunque, quién sabe, a lo mejor esta promoción comercial se deriva es que, con anterioridad, se estaba pidiendo un precio excesivo por estas simpáticas mascotas y se había generado una burbuja. La burbuja de la cobaya. Porque, 97 euros son más de 16.000 pesetas, nuestra añorada rubia.

Las cobayas, las pobres, son además unos animales muy utilizados en la experimentación biomédica. Es decir, muchas no han vivido nunca fuera de los laboratorios. Y ahora, para males mayores, en plena crisis, caen en las redes de las rebajas porque nadie las quiere. Claro que no es el único animal que está en rebajas en estos duros tiempos. Todos empezamos a conocer a muchos.

viernes, 27 de abril de 2012

La oscuridad del día

La noche siempre es oscura. Pero, creo que ahora los días son, al menos, tan oscuros como las noches.

lunes, 23 de abril de 2012

El Slim & Lift Aire reta a Naturhouse en la búsqueda de los cuerpos esculturales


Sigo con mi análisis de la teletienda, y su impacto en la mejora del consumo. Y es que, pese a la crisis económica, se puede tener una figura envidiable. Acabo de ver en la televisión un anuncio de Slim & Lift Aire, para ser claros, una faja. Lo mejor de esta publicidad televisiva es que primero salen unas señoras, entradas en carnes, que a duras penas pueden abrocharse el pantalón o ponerse un vestido. Y sufren enormemente por no poder vestir la ropa deseada. 




Pero después, y como por arte de magia, las protagonistas del anuncio se convierten en unas bellas sílfides nada más ponerse la faja. Claro, yo diría que las actrices del anuncio cambian porque después aparecen unas modelos que, para nada, necesitan una faja, porque no tienen ningún michelín ni flotador que esconder. Para no irnos por las ramas, salen unas tías más que buenas, algunas tipo Playboy, mostrando lo bien que puede llegar a quedar la faja.

En cualquier caso, los promotores del Slim & Lift Aire defienden la eficacia de la faja para tener una gran imagen. Por un lado, apuestan por competir con Naturhouse, Adelgar y otros rivales que defienden la apuesta por el adelgazamiento, y por otro destacan que con la faja ya no hace falta ni hacer dieta ni practicar ejercicio físico. 

Además, los impulsores del Slim & Lift Aire quieren dejar claro que conocen bien el momento económico tan duro que se está viviendo. Así, por un precio de 59 euros no se vende una faja, sino dos, la segunda de color negro. Al mismo tiempo se regala una combinación. Es decir, tres por uno. 

domingo, 22 de abril de 2012

Los donuts, tan cerca y tan lejos

Los donuts han vuelto con fuerza en su 50 aniversario. Las televisiones están reproduciendo con asiduidad en estos días un anuncio sobre los donuts tradicionales. En la publicidad, unos veteranos operarios vuelven a la fábrica donde se producen estos ya legendarios bollos con el objetivo de volver a la receta clásica que todos los consumidores añoran. Al final, las clásicas camionetas amarillas vuelven a las calles a distribuir los donuts tradicionales, acompañadas del lema "Anda, los donuts".




Tengo que reconocer los donuts son una maravilla. Qué bollos tan esponjosos y dulces. Si es que, hasta da gusto chuparse los dedos tras comerse un donut. Los clásicos de azúcar son sensacionales pero, los que tienen una capa de chocolate cubriendo una de las partes se merecen una merienda o un desayuno.

En algunos casos, los donuts fueron el camino hacia la perdición. Homer Simpson fue el ejemplo más destacable. Fue capaz de vender su alma por un donut, acabando en el infierno.




En los últimos tiempos, diversos centros comerciales en Madrid ofrecían promociones de descuento en las cajas de donuts, una vez concluida la compra.  Pero, a veces, los donuts está a la vez cerca y lejos. Cerca porque están a la vista, se pueden coger con sólo extender un brazo en la panadería.

Pero, en otras ocasiones, están muy lejos, especialmente cuando el médico te dice que tienes alta la glucosa, el colesterol y los triglicéridos. En ese momento, el donut se convierte en una tentación difícil de resistir. Si Homer vendió su alma por uno...


Ps: Fue muy popular también aquella de los donuts, en la que los clientes pedían en la cafetería, "uno sólo", y ponía uno, "uno doble", y ponían dos, "un cortado", y ponían medio donut...