martes, 23 de diciembre de 2014

Escúchame cuando te hable

Caminaba por la calle el otro día cuando me crucé con un individuo que iba a compañado por su perro. Parecía serio, quizá enfadado. Estábamos todavía a menos de dos metros, cuando este amable señor le dijo muy seriamente a su chucho, "escúchame cuando te hable". Pensé que podía haber alguien más y que yo no me hubiera percatado, pero no. "Tenemos que darnos prisa", le volvió a decir.

Sin duda, el mejor amigo del hombre.