domingo, 6 de diciembre de 2009

La crema de veneno de serpiente alisa las arrugas

En la lucha del hombre por encontrar la eterna juventud, la novedad que vino hace tres o cuatro años fue la baba de caracol. A partir de entonces, la vida de este simpático animal que vive con la casita a cuestas se volvió más complicada, muchos acabaron en la cazuela y los muros donde habitaban se quedaron despoblados.

Ahora la última moda para alcanzar la eterna juventud es la crema de veneno de serpiente. Los anuncios sobre sus bondades en la lucha contra la arruga se escuchan en las radios o se pueden ver en diversas publicaciones tanto de internet como de papel. Con las cremas hechas de veneno de serpiente, especialmente de la víbora, todos podemos vernos mucho más jóvenes. No hará falta recurrir al botox.

Ya empiezo a entender porque muchos turistas que viajan a países exóticos de Latinoamérica o el sudeste asiático se traen a escondidas este tipo de animales. Te traes una serpiente pequeñita a España (o Francia o Italia o ...), habilitas una cómoda residencia en la bañera de casa o en un acuario habilitado al respecto, por ejemplo, la cebas durante un tiempo para que gane tamaño y volumen (en su caso grosor) y al cabo de un tiempo ya estás en disposición de tener unos botes de crema basada en su veneno con el que rejuveneces al menos diez años.

El problema es si escapa. Cuando esto sucedía antes, el vecino o vecina se llevaban un susto de muerte al ver en su baño o salón una serpiente. Más de un caso de estas características se ha visto en la televisión. Pero ahora es distinto. Se te escapa la serpiente y se marcha a casa de los vecinos, y al cabo de unas semanas te los encuentras en el ascensor o en la escalera con aspecto de tener diez años menos. Esto es un aviso para los gestores de Corporación Dermoestética: tenéis un nuevo enemigo, la crema de veneno de serpiente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario