lunes, 21 de mayo de 2012

"Buenos días", y nadie contesta

Esta mañana he ido al médico, para una revisión rutinaria. Lo más impactante de mi visita ha sido nada más acceder al recinto o sala de espera. He dicho "buenos días", y nadie me ha contestado. Nadie. Por situar al lector, había siete personas. Para los que no me conocen, habitualmente hablo bastante alto y ninguno de los presentes podría argumentar que no me ha oído.

De todas maneras, lo peor de todo es cuando sales o entras al ascensor, entras o sales de casa, dices buenos días o buenas tardes y no te contestan. ¿Me habré vuelto invisible?

El problema de que nadie conteste al saludar es que se corre el riesgo de dejar de saludar en ocasiones futuras. Claro, si te acostumbras a no responder y un día, alguien te dice "buenos días", y no contestas, podrá pensar lo mismo que estoy escribiendo ahora mismo, "qué borreguetes".

1 comentario: