Ayer vi algunas de las carreras de motos del campeonato mundial de este año. La carrera de 125 centímetros cúbicos fue muy disputada entre los pilotos españoles, quienes se mostraron como los grandes dominadores.
El caso es que, nada más terminar esta carrera, me levanté unos instantes del sofá. Al volver, en la televisión aparecía uno de los pilotos quitándose el casco y ¡era un niño! Lo primero que pensé es que este piloto no era de verdad sino que era el protagonista del anuncio de alguno de los patrocinadores: Sony Playstation, Cola Cao o Nocilla (no tengo idea de quienes son exactamente los patrocinadores). Pero no, en pocos segundos pude ver que el niño piloto era un piloto de verdad porque estaba celebrando su buena carrera. Sí, el chico corre en el campeonato mundial. Claro que no era el único, había unos cuantos más baby-drivers.
Y reflexioné. Estos chicos no irán ya al colegio o instituto. No les puede dar tiempo. De igual forma, es muy probable que algunos de estos nenes todavía jueguen a las carreras con la citada Playstation o en la Xbox. Es más, seguro que entrenan con la Playstation. Lo que no tengo claro es si la actual legislación permitiría a estos chicos conducir las motos de esta misma cilindrada en las calles y carreteras, es decir, fuera de los circuitos.
En cualquier caso, deseo mucha suerte a estos jóvenes pilotos de este baby-mundial.
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