En París, el monumento más visitado es la Torre Eiffel. Al menos así coinciden las distintas guías turísticas que he leído. Además de ser un lugar sugerente y cautivador, muchos visitantes aguardan horas y horas para poder subir a la parte más alta y así poder contemplar desde ese inigualable lugar, las espectaculares vistas que ofrece la capital francesa.
En este punto planteo una cuestión para quien quiera responderla. ¿A qué están esperando los dueños de los grandes rasacielos de Madrid a habilitar miradores para atraer a los turistas? Torre Picasso, Torre Europa, Torre BBVA, Torres Kio. Se me ocurre, por ejemplo, que Caja Madrid podría empezar a explotar un buen mirador desde su nuevo rascacielos de la Castellana. Su torre es más alta que las citadas con anterioridad y es, quizá, la mejor orientada de los cuatro nuevos rascacielos construidos sobre los terrenos de la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid, dado que es la que está situada más al sur y desde la que mejor podría verse el conjunto de la ciudad.
De hecho podrían hacer negocio al cobrar diez euros a cada uno de los adultos visitantes. En la Torre Eiffel cobran 13 euros. No es mucho pero así se pueden rentabilizar aunque sea poquito a poquito las inversiones inmobiliarias.
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